La lógica de la representación captura una dinámica social: las mujeres están, pero para ser miradas.Pero se trata solo de un momento de carnavalización. Pero esa lógica se invierte en un espacio cerrado, en tanto la aparición de una mujer no puede alterar las reglas que lo rigen, pues pondría en peligro la seguridad de tal espacio. Hay una llave, por decirlo de algún modo, pero pertenece a los varones.