Le costó arrancar, pero finalmente empezó a contar con minutos, y dejó alguna temporada interesante, alcanzando en el curso 10-11, 16.8 puntos y 8.2 rebotes de media por partido. El año pasado, en el Baskonia, realizó una temporada sensacional, lo que le deja como uno de los grandes iconos en la liga china, su nueva casa. No pudo conseguir hacerse un hueco en la liga norteamericana, y tras varios a la sombra de Zach Randolph y Marc Gasol en Memphis, decidió salir rumbo a una competición en la que contase con más oportunidades.